Piden enviar el ejército a Marsella por la violencia de narcos locales
Hollande declaró este jueves 30 de agosto que ‘el papel del ejército no es controlar los barrios’ en una alusión a la propuesta de una senadora socialista que sugirió enviar al ejército a Marsella en razón de la multiplicación de ajustes de cuenta entre narcotraficantes. Un joven fue asesinado la víspera con una Kalashnikov.
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El Gobierno francés rechazó este jueves enviar al ejército para hacer frente a una oleada de ajustes de cuentas entre narcotraficantes en la ciudad de Marsella (sur) pero prometió un programa de acción para restablecer el orden y hacer frente a la violencia.
El presidente Hollande estimó que “el papel del ejército no es controlar los barrios”. Una senadora socialista, alcaldesa de dos distritos de esa ciudad, Samia Ghali, reclamó la intervención del ejército a raíz de la multiplicación de ajustes de cuenta en los últimos meses.
Un hombre de 25 años, con antecedentes de narcotráfico, fue asesinado la víspera por una ráfaga de Kalashnikov disparada desde un coche. Su muerte eleva a 19 el número de personas asesinadas en ajustes de cuentas entre narcotraficantes en la región eo que va de este año (de los cuales 14 en Marsella).
Por su parte, el ministro del Interior, Manuel Valls, manifestó: "Entiendo la llamada de socorro" lanzada por la parlamentaria pero precisó también que “está fuera de lugar que el ejército pueda responder a esos dramas y a esos crímenes. No hay enemigo interior”.
Valls subrayó en un comunicado que para combatir la criminalidad se necesita “una acción en profundidad de la policía y de la justicia”. El primer ministro francés, Jean-Marc Ayrault, anunció por su parte que el próximo 6 de septiembre presidirá un comité interministerial para elaborar un programa de acción.
“Creo que las autoridades no se dan cuenta de la gravedad de la situación”, afirmó Ghali, que señaló que en algunos barrios “el primer empleo de los jóvenes es el tráfico de estupefacientes”.
El ejército no ha intervenido jamás en la historia reciente de Francia para mantener el orden en los barrios difíciles y tampoco lo hizo durante la revuelta de mayo del 1968, que paralizó a Francia, ni durante los motines urbanos de noviembre de 2005.
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