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CRISIS MIGRATORIA

La fotografía que avergüenza a Europa

La fotografía de un agente turco cargando el cadaver de un niño ahogado en una playa  tras el naufragio de dos embarcaciones de refugiados ha generado una ola de conmoción en Europa. Los diarios de todo el continente han reflejado esta conmoción.  El hashtag #KyyiyqVurqnlnsqnlik viraliza la instantánea en las redes sociales

La fotografía que ha conmocionado a Europa. Un guardacostas turco transporta el cadaver del niño ahogado en la playa
La fotografía que ha conmocionado a Europa. Un guardacostas turco transporta el cadaver del niño ahogado en la playa AFP PHOTO / DOGAN NEWS AGENCY
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#KyyiyqVurqnlnsqnlik significa en turco "la humanidad ha naufragado" y es el hashtag que ha corrido como la pólvora en redes sociales mostrando la fotografía de un agente turco cargando el cadaver de un niño de corta edad ahogado en una playa turca tras el naufragio de dos embarcaciones de refugiados sirios y que ha generado una ola de conmoción en Europa.

Los diarios de todo el continente han reflejado esta conmoción de una u otra forma en sus tribunas, artículos y titulares. Muchos de ellos la seleccionaron para su portada en momentos en el que la crisis de los refugiados monopoliza la apertura de informativos.

En España, el diario El Mundo señala que la foto "forma parte del álbum migratorio de la infamia" mientras que el inglés The Guardian afirma que dicha instantánea resume "todo el horror y el drama humano que se vive en las costas europeas". Por su parte, otro diario británico, The Independent se interroga: "Si imágenes tan potentes como la del niño sirio no cambian la actitud de Europa frente a los refugiados, ¿Qué podría hacerlo?". En Italia,el rotativo La Repubblica reprodujo la imagen en Twitter titulándola "Una foto para silenciar al mundo".

También algunos líderes políticos de distintos países europeos se han referido en las últimas horas a la fotografía. Reacciones como la de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau señalando en twitter: "La foto de Aylan es insoportable y por eso hay q verla. Las políticas europeas son coresponsables de una realidad insoportable"

También el primer ministro francés, Manuel Valls, ha expresado en su cuenta de la red social la "urgencia de actuar" ante el drama que vive el continente.

 

No todos hoy en Europa coinciden con su análisis. Para el primer minsitro húngaro, Viktor Orban , el mensaje que Europa debe transmitir a través de la foto del niño es "por favor, no vengan. Quédense en Turquía. Es mejor para sus hijos". Así lo ha manifestado esta misma mañana desde Bruselas en una rueda de prensa cargada de tensión y malas miradas junto al presidente del Parlamento europeo, Martin Schültz.

La de Aylan Kurdi -así se llamaba el niño-  es, posiblemente, la escena más sobrecogedora, más ácida que se conoce del drama migratorio. Una imagen que pasará a la historia del fotoperiodismo y de las conciencias.  Desde principios de año han llegado a Grecia 160.000 personas, del total de cerca de 350.000 que se estima que han cruzado el Mediterráneo, una ruta en la que han muerto unos 2.000 migrantes. La isla de Lesbos, al igual que Kos, también en el Egeo, se ha convertido en el punto de entrada a Europa de refugiados que huyen a través de Turquía de los conflictos armados en Oriente Medio y África

Pero hay otra imagen que ha levantado la crispación en la prensa europea de este

jueves. Porque, por si toda esta situación fuera poco, el periódico checo Zprávy ha publicado una fotografía que congela el momento en el que una policía marca con un número la mano de una refugiada. A su lado hay otro niño que tiene apuntado el número 77. La foto es de la agencia checa ČTK, que la tomó durante la evacuación de 214 migrantes en la noche del martes en la estación de Břeclav.

El portavoz de la ONG Human Rights Watch, Andrew Stroehlein, la tuiteó y la indignación se multiplicó en Twitter a medida que crecían los miles de retuits.

El titular de exteriores de Hungría, Peter Szijjarto, explicó en la jornada del miércoles la postura del ejecutivo de Budapest. "Registraremos a todos los que presenten una solicitud de asilo y llevaremos a cabo el procedimiento".  Según el canciller húngaro, cuyo gobierno echa la culpa a Alemania de la crisis actual, "si la solicitud de asilo recibe una respuesta positiva, el refugiado podrá quedarse. De lo contrario, será considerado un inmigrante 'económico', por lo que deberá regresar al último país de tránsito"

 

(Con AFP)

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