París y Londres acuerdan enfrentar juntos la crisis migratoria en Calais

Francia y el Reino Unido implementarán un "centro de mando y control conjunto" en la ciudad de Calais para luchar contra los traficantes que ayudan a los migrantes a cruzar el canal de la Mancha hasta el Reino Unido. Es el principal elemento del acuerdo que firmaron este jueves los ministros del interior de ambos países, de visita en la localidad norteña.

El ministro del Interior francés, Bernard Cazeneuve, y su homóloga británica, Theresa May, en las cercanías del Eurotúnel, este jueves 20 de agosto de 2015. REUTERS/Regis Duvignau

Según lo que ha revelado el ministerio del Interior del Reino Unido, policías británicos - menos de una decena según informaciones del vespertino francés Le Monde - serán desplegados en la ciudad de Calais, en suelo francés. En esta urbe al borde del canal de La Mancha, respaldarán a sus colegas franceses para combatir las redes de traficantes que ayudan a los clandestinos a cruzar hasta Inglaterra, ya sea en los ferry que cruzan o en el tren que pasa por el túnel.

"Es necesario que los traficantes de personas que pertenecen a organizaciones criminales internacionales sean juzgados y que su organización sea desmantelada", indicó el ministro del Interior francés, Bernard Cazeneuve. "Son más de 120 filiales de las organizaciones de la inmigración irregular que han sido desmanteladas desde el principio de año que desarrollaban su actividad aquí en Calais", añadió.

Sobretodo, el principal anuncio de este plan es que los agentes británicos trabajarán junto a las autoridades francesas en un nuevo "centro de mando y control", creado para reforzar la cooperación bilateral en la materia.

Entre las nuevas medidas del pacto se encuentra también un incremento del número de efectivos por parte de Francia. Asimismo, el propio operador del Eurotúnel recibirá un "apoyo" no especificado para desplegar a más guardias de seguridad.

Calmar la polémica

El acuerdo, firmado este jueves por Cazeneuve y su homóloga británica Theresa May, de visita conjunta en Calais, busca sobretodo dejar en el olvido las disputas de hace algunas semanas cuando Reino Unido reprochaba a Francia la situación caótica en las cercanías del túnel, donde han muerto varios inmigrantes al intentar cruzar el canal de La Mancha. París por su parte acusaba a su vecino de haberla convertido en su brazo policial.

Este jueves, Londres formalizó también el pago de 10 millones de euros, que se añaden a la contribución británica de 15 millones en tres años, decidida en 2014. Los fondos del Reino Unido servirán para mejorar la seguridad en el túnel con más equipos y cámaras de seguridad y edificar una nueva valla en las inmediaciones del mismo.

Migrantes vigilados por agentes de seguridad cerca del Eurotúnel, en las afueras de la localidad francesa de Calais, este 19 de agosto de 2015. REUTERS/Regis Duvignau

Pero, por primera vez, debería también apoyar acciones "humanitarias": facilitar el retorno de los migrantes voluntarios y financiar alojamientos para algunos demandantes de asilo y para los más vulnerables.

Pero nada dice que será suficiente para enfrentar la crisis humanitaria que se vive en las calles de Calais donde se han congregado unos 3000 migrantes que sobreviven en condiciones pésimas. "Estamos hartos de asumir las responsabilidades del Estado", decía este martes al diario Le Monde un responsable de la ong Médicos del Mundo, que ha desplegado una clínica de emergencia en el lugar.