Perú está siendo teatro de diversos conflictos sociales vinculados a la actividad minera: recientes protestas contra el aumento de esta actividad han dejado cinco muertos y decenas de detenidos, y el Gobierno ha decretado el estado de emergencia y la suspensión de todas las garantías individuales en la provincia arequipeña de Islay donde se concentra el grueso de las explotaciones mineras.La consultora PricewaterhouseCoopers afirma que el potencial de yacimiento de Perú es el cuarto más grande del mundo. El país es el primer productor en América Latina de zinc, estaño, plomo y oro y ocupa el tercer lugar para la producción de cobre. El año pasado, las exportaciones mineras superaron los 20.000 millones de dólares.Entrevistados: Marco Zeisser, miembro de la organización CooperAcción de Perú, Idelso Hernández, presidente de la Central Única Nacional de Rondas Campesinas del Perú, y Rosa Sara Huamán, dirigente de la comunidad campesina San Juan de Cañaris.