El último empate frente a Lyon tiene en alerta al equipo parisino, que no conoce la victoria desde la cuarta jornada de la Ligue 1.
Los de Laurent Blanc acusan un problema preciso: no poder liquidar los partidos, y así dar vida a rivales que no la tenían, y que terminan empatando los encuentros. Sucedió en la semana frente al Ajax, por la Liga de Campeones, y el domingo en el Parque de los Príncipes, frente a Lyon, luego de dominar buena parte del encuentro.
“Nunca hablamos de crisis o de algo parecido, no hay ningún problema, apenas llevamos seis jornadas del campeonato”, dijo Blaise Matuidi en un tono tranquilizador. “Claro, hoy el París Saint-Germain da de qué hablar, porque es un club grande, también porque se espera que ganemos todos los partidos, pero cada encuentro es difícil, contra equipos que juegan al 150%, al 200%: ante eso nos toca decir ‘presente’; en los últimos tres partidos no lo logramos hacer, pero repito, no tengo problemas, creo que volveremos pronto a la victoria”, agregó el mediocampista.
El entrenador Laurent Blanc no siente amenazado su lugar, pero sabe que debe ganar este miércoles frente a Caen, por la séptima jornada del torneo. Un día antes, en el arranque de la fecha, el líder Marsella visita a Reims, buscando un triunfo para presionar a sus dos escoltas, Saint-Etienne y Bordeaux, que chocan el jueves.
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