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El suizo Stanislas Wawrinka sorprendió y se consagró en el Abierto de Australia de tenis. El tenista helvético, que arranca la semana como número 3 mundial, consiguió el primer Grand Slam de su carrera tras vencer en 4 sets a un Rafael Nadal que se lesionó en la espalda durante el calentamiento previo a la final.

Stanislas Wawrinka recibe su trofeo, este 26 de enero de 2014 en Melbourne.
Stanislas Wawrinka recibe su trofeo, este 26 de enero de 2014 en Melbourne. REUTERS/Petar Kujundzic
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A pesar de la contrariedad, del ambiente enrarecido y del desnivel entre ambos jugadores en la final, Wawrinka se llevó un torneo que mereció con creces tras apear a tenistas de la talla de Djokovic, Berdych o el mismo Nadal.

El de Lausana llegó a la cima de su carrera deportiva, a su madurez tenística con casi 29 años mientras que Rafa Nadal se quedó a las puertas de anotarse su Grand Slam número 14, lo que igualaría la marca del mítico Pete Sampras que ayer estaba presente en Melbourne para entregar el trofeo del torneo oceánico.

De todos modos y pese a perder la final, Nadal se afianza como número 1 mundial ya que sumó 1.200 puntos en el primer Grand Slam del año mientras que Djokovic perdió 1.640 puntos después de caer en cuartos ante el actual campeón.

El mallorquín, que tuvo que ser masajeado en su espalda en tres ocasiones durante la final, llegó incluso a hacerse con la tercera manga del encuentro. Pero sólo fue un espejismo, ya que los nervios habían traicionado a Wawrinka que no entendía como su rival abandonaba la cancha para ser atendido por los médicos en varias ocasiones.

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