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El Invitado de RFI

Mirtha Pozzi y Pablo Cueco, mano a mano, golpe a golpe

Primera modificación:

Este sábado va a tener lugar un concierto en la sala parisina L'Angora del dúo compuesto por los percusionistas Mirtha Pozzi y Pablo Cueco, en el que con el título Tambour et mot-totem, es decir tambor y palabra tótem, abordan los mitos precolombinos a través de tambores, ritmo y onomatopeyas. 

Mirtha Pozzi y Pablo Cueco en los estudios de RFI
Mirtha Pozzi y Pablo Cueco en los estudios de RFI Foto: Jordi Batallé/RFI
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Mirtha Pozzi nace en Uruguay y Pablo Cueco en la región francesa de Corrèze y ambos llevan muchos años, y varios discos, colaborando. 

Acabáis de grabar un disco formando parte del cuarteto de jazz Wiwex, junto con el saxofonista Nathan Hanson y el contrabajista Doan Brian Roessler, álbum que con el titulo Equidistant nos recuerda que los orígenes del jazz son africanos.

Sí, pero el jazz es norteamericano, de la comunidad negra. Y curiosamente hay una influencia enorme del jazz sobre la música africana. Y es evidente que la música africana ha influenciado al jazz, quizás por el lado cubano. No hay una vía directa.

¿Cómo fue el encuentro con los componentes norteamericanos del cuarteto?

Nos encontramos en Mineapolis, donde fuimos invitados a tocar en un festival organizado por un productor de discos francés. En ese festival existe la tradición de actuar con un programa definido, pero después todos los músicos se reúnen para improvisar, para tocar juntos.

Nathan Hanson y Doan Brian Roessler vinieron a Francia de gira y nos encontramos primero para comer juntos. Pablo preparó una buena comida como el sabe hacerlo y ahí nos dijimos que sería bueno hacer un concierto aquí en París, eso fue en el 2011.

Allí nació la idea del disco: grabamos al año siguiente, cuando ellos volvieron a Francia, en los estudios Davout.

Son unos estudios míticos de París, ¿quién grabó en esos estudios?

Los Rolling Stones, me parece. Es un estudio gigantesco. Es casi como un estadio. Bueno no tanto, pero se puede jugar al baloncesto en él.

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¿Lograste, Mirtha, calentar el ambiente de ese “estadio”? 

Sí, pero allí tenía muchos instrumentos que no eran naturales, la mayoría eran metálicos.

Metal que sumerjo en el agua para modular el sonido de los platillos, junto a una gran cantidad de objetos que encuentro y coloco sobre los platillos... Pero también había congas, las congas no las olvido.

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