Evo Morales lleva a Argentina su reclamo por una salida al mar
Primera modificación:
Escuchar - 04:40
El presidente boliviano Evo Morales viaja a Argentina para reunirse con su colega Cristina Fernández de Kirchner para discutir la integración energética entre ambos países. Durante su estadía en la capital Buenos Aires el mandatario participará de un acto sindical, en apoyo a la causa marítima de su país.
"Bienvenido a una parte de la Patria Grande, a la que se le ha mutilado su derecho de acceso al mar mediante una invasión". Así recibía el presidente boliviano Evo Morales al Papa Francisco durante su visita a Bolivia la semana pasada y ponía en el centro del debate el eterno problema territorial del país del altiplano que no tiene una salida al mar.
El pontífice argentino consideró que el pedido boliviano era "justo" pero se mantuvo al margen aclarando que la Iglesia Católica no puede ser mediadora en este momento. "Mi intervención (en la catedral de Bolivia) fue clara. Quise intervenir sobre ese problema en Bolivia, pero respetando la situación como está planteada en este momento, ya que un tribunal internacional debe pronunciarse por lo que no se puede hablar de mediación", explicó el papa.
Unos días después de la visita papal, Morales viajó a Argentina para reunirse este miércoles con su colega Cristina Kirchner y discutir la integració energética de ambos países.
Pero la agenda de Morales incluye también su participación en un evento público organizado por un sindicato argentino, la Central de Trabajadores de Argentina (CTA), en apoyo a la causa boliviana de una salida soberana al mar que reclama a Chile.
"El gobierno boliviano esta asumiendo una estrategia más agresiva para solicitar solidaridad con la demanda de Bolivia a los países vecinos, como yalo hizo con Perú, con Ecuador, con Venezuela", explica el analista político boliviano Gustavo Pedraza.
La reciente visita del Papa despertó en el pueblo boliviano la esperanza de resolver el diferendo. La figura papal en los conflictos territoriales sudamericanos tomó importancia luego que Juan Pablo II actuara como mediador en 1978 entre Argentina y Chile cuando ambos países casi entran en guerra por la soberanía de las islas del canal Beagle.
Más allá de las esperanzas, según Pedraza, el presidente boliviano no encontrará un eco contundente por parte de las autoridades argentinas debido a las cercanas relaciones que mantienen con Chile. "Será un apoyo mesurado", dice Pedraza.
Bolivia perdió sus costas marítimas luego de la guerra con Chile a finales del siglo XIX. La derrota sigue viva en la memoria de los bolivianos y es una causa que amalgama a un pueblo, muy dividido en otros temas.
En 2013 al gobierno de Morales llevó el caso a la Corte Internacional de Justicia de La Haya para obligar a Chile a negociar una salida al mar. Por la falta de solución del conflicto, Bolivia y Chile mantienen rotas sus relaciones diplómaticas desde 1978. El canciller chileno Heraldo Muñoz ofreció a principios de julio retomar las relaciones plenas, pero Bolivia respondió que primero debe resolverse su demande marítima.
Entrevistados: Gustavo Pedraza, analista político; Carlos Portales, exdiplomático y profesor en la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales, Chile.
Boletín de noticiasNoticias internacionales esenciales todas las mañanas
Suscribo