Nicaragua, movilización contra el canal interoceánico

En Julio del 2013, el presidente nicaragüense, Daniel Ortega, y la mayoría oficialista, aprobaron un contrato de concesión, con amplios poderes, a la empresa china HK Nicaragua Development Investment (HKND), para la construcción de un canal interoceánico y de infraestructuras.

Trazado del futuro Canal Interoceánico de Nicaragua. DR

Por ahora se desconoce el impacto ecológico del futuro canal interoceánico porque los estudios realizados son incompletos y, según la Red Latinoamericana y del Caribe para la Democracia (RedLad), "la información se maneja en secreto, generando desconfianza e incertidumbre en las comunidades campesinas que podrían ser afectadas".

Desde el punto de vista puramente ambiental, las organizaciones ecologistas tienen pistas. El Ingeniero Víctor Manuel Campos, subdirector de la Fundación Humboldt, enumera algunas: “El deterioro de la mayor reserva de agua potable de Nicaragua y de América central, impedirá la libre circulación de animales en el corredor biológico mesoamericano y pondrá en peligro a muchos de ellos, como las tortugas marinas, que ya figuran en la lista de especies en vías de extinción de algunos organismos internacionales.”

El impacto será ambiental, pero también social, alertan las organizaciones ecologistas. No obstante, la movilización está en marcha. Un ejemplo de ello es la actitud combativa de las comunidades campesinas que, con o sin estudios sobre el impacto social o ecológico del proyecto, están seguras de que la construcción del canal tendrá repercusiones graves en la vida de los habitantes de las zonas rurales. El lunes pasado, cuando Wang Jing, el propietario de la concesionaria china HKND, inauguró las obras preliminares a la construcción del mega canal nicaragüense, se produjeron protestas que dejaron por los menos 2 muertos, 31 heridos y 33 detenidos, aunque la policía desmiente que haya víctimas mortales.

Los opositores al proyecto han intentado recursos legales internos para evitar la construcción del canal pero, conscientes de que las demandas judiciales internas no prosperarán, intentan acceder a organismos internacionales como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, precisa Víctor Manuel Campos.

Otro de los aspectos oscuros del proyecto es el financiamiento de la construcción del canal, cuyo coste está estimado, por el momento, en 50.000 millones de dólares.

Entrevistado: Víctor Manuel Campos, sub director de la Fundación Humboldt, Nicaragua.