Millones de brasileños irán a las urnas el domingo 5 de octubre para renovar los poderes ejecutivo y legislativo. La presidenta Dilma Rousseff, representante del PT (Partido de los Trabajadores), vuelve a situarse como favorita de las encuestas a su propia reelección, pero se da por hecho que habrá una segunda vuelta.Aunque los principales indicadores macroeconómicos de la primera economía latinoamericana muestran una situación de relativo estancamiento, no parece que sean determinantes en la elección de los votantes quienes, a decir de nuestro entrevistado, optarán por alguno de los candidatos más con la emoción que con la razón.Entrevistado: Gaspard Estrada, analista político, responsable de comunicación del OPALC, el Observatorio Político de América Latina y el Caribe, del Instituto de Ciencias Políticas -Sciences Po- de Francia.