Las FARC realizan su primer mea culpa
Inédito. En un comunicado, la jefatura de la guerrilla habla de "repudio y condena" del atentado cometido este mes por una de sus columnas, en el que murió un civil. Aseguran que se autoaplicarán sanciones. Desde Davos, el presidente Santos valoró “que hayan reconocido” la autoría.
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Esto demuestra que las FARC están fragmentadas y que una parte de su dirigencia sí quiere negociar la paz.
Jairo Libreros, catedrático de la Universidad Externado de Bogotá.
En el comunicado difundido el viernes, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) aseguran que nunca tuvieron la intención de ocasionar daño a civiles y se autoacusan por la falta de previsión. Aseguran que la orden del ataque explosivo del 16 de enero contra una comisaría de la localidad de Pradera (Valle del Cauca) que causó la muerte de un hombre e hirió a 25 civiles y militares, merece "nuestro reproche abierto".
La orden fue dada por el llamado Bloque Móvil Arturo Ruiz y la guerrilla informó que aplicará "los correspondientes correctivos disciplinarios" a los responsables.
Desde Davos, el presidente Juan Manuel Santos valoró “que hayan reconocido que fueron ellos los que realizaron el ataque". Hace una semana, Santos aseguraba “imaginar a los lideres de las FARC sentados en el Congreso al término del proceso de paz” y después de haber abandonado las armas.
En Colombia, los analistas quieren creer que las FARC estarían renunciando a este tipo de ataques. "Es la primera vez que ellos condenan un atentado, no es solamente que lo reprochan sino que señalan que así no se hace la guerra. Esto representa la renuncia de las FARC a este tipo de ataque", dijo Jorge Alberto Restrepo, director del Centro de Recursos para el Análisis de Conflictos
(CERAC).
Para Restrepo, estas declaraciones van a tener un impacto positivo en los diálogos de paz entre la guerrilla más antigua de América Latina y el gobierno, pero también muestra que las FARC tienen dificultades para controlar las columnas móviles.
Las negociaciones de paz entre Bogotá y las FARC comenzaron a fines del 2012 y los cálculos mas optimistas indican que podrían cerrarse en 2014, después de las elecciones presidenciales de mayo donde Santos buscará la reelección.
Se estima que las FARC cuentan hoy con entre 7000 y 8000 efectivos en todo el país.
(con AFP)
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